Convierte el baño de tu bebé en un momento único

Convierte el baño de tu bebé en un momento único. El baño, tan amado y odiado al mismo tiempo. El agua es un elemento que da vida, con la que tanto nos hidratamos como limpiamos nuestra piel. Aunque la hora del baño suele ser vista, al menos por los adultos, como un momento de relajación donde dedicamos unos minutos a cuidarnos y darnos amor, a veces no es visto igual por los más pequeños. En ocasiones, la hora del baño de tu bebé puede llegar a convertirse en un maremoto de lloros, gritos y pataletas.

¿Cómo convertir ese momento del día en algo especial?

• Prepara el ambiente ideal. Vigila que el espacio donde se vaya a realizar el baño esté libre de corrientes de aire. Acompaña el momento de música y de una luz tenue. El objetivo además de la limpieza, es que se relaje. Esto es importante sobre todo, si vamos a elegir el momento del baño como una rutina para comenzar el sueño.
• Vigila la temperatura. Si el primer contacto del niño con el agua es desagradable, estamos sentenciando el proceso desde el principio. Prepara el agua para que la temperatura sea óptima. Ni muy fría ni muy caliente. Una temperatura que resulte agradable y no sea un cambio radical a su nivel de temperatura corporal.
• Juguetes, también en el agua. Escoge juguetes adecuados a la edad del bebe .Existen actualmente cientos de artículos que pueden ofrecer unos instantes divertidos donde los únicos gritos que podamos oír, sean de felicidad.
• Habla, canta y ríe con él. No dejes que el momento del baño suponga un suplicio para ti. Si el niño siente que tu estas relajada y feliz, él también lo estará. Háblale, cuéntale todo lo que vas a hacer. Por ejemplo: «Ahora vamos a poner champú par que el pelo quede bonito y brillante´´ «Ahora vamos a cortar esas uñas para que no te hagas pupa con ellas´´
• Genera una dinámica familiar tranquila y sosegada. Libre de lloros y rabietas.
• El momento de aclarar: Momento crucial El momento de aclarar el pelo suele ser uno de los momentos más temidos por padres y niños. Si es un bebé esto se puede manejar, pero si es un niño su movimiento y negación pueden complicar la faena. Además de usar champús que no irriten los ojos, existen ciertos gorros que evitan que el agua entre en los ojos en el momento del aclarado. Pero sin duda, la mejor opción es intentar hacerle razonar. Intentar que colabore y ponga su cabeza inclinada hacia atrás para así, evitar lloros, gritos y tensión.

Recuerda que el momento del baño debe ser visto con ilusión y no con negativas y ceños fruncidos. Disfrutarán ellos y vosotros de ese momento tan especial como es el baño del bebé.