El fantasma del castillo es una sencilla manualidad, que nos envía David desde su blog, para que los peques preparen. Es ideal para hacer en Halloween, pero si una tarde lluviosa tenemos unos envases de yogur vacíos a mano, también nos podemos poner manos a la obra con ellos. Eso sí… ¡Abstenerse miedosos!
Cortamos una tira de papel tan ancha como el envase de yogur y dibujamos unas líneas a modo de ladrillo y una puerta o ventana (la del castillo).
Forramos el yogur con el papel
En otro papel, dibujamos un fantasma y recortamos su silueta.
Pegamos el palo a la silueta del fantasma
Introducimos el
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