Una mandala Arcoiris en 3D con material reciclado

Una fantástica mandala en 3-D que nos sorprenderá por la vistosidad de su resultado.  Solo tenéis que mirar que precioso trabajo se puede hacer con unos tapones reciclados de diferentes colores. La realización de la mandala del arcoiris es el final de una actividad en la que se trabajan diversos conceptos matemáticos y de conocimiento del entorno.

A partir de un trabajo sobre el reciclaje en el que expliquemos a los niños que debemos reciclar todo lo posible para hacer nuestro mundo más ecológico y preservarlo para futuras generaciones, pediremos a los niños que recojan y traigan a la escuela todos los tapones de plástico que puedan sin que ello les haga olvidar reciclar el envase al que pertenecen. Una vez tenemos todos los tapones en el aula, debemos proceder a la clasificación de los mismos con lo que realizaremos con los niños un trabajo matemático en el que deberán clasificarlos según su color y su tamaño.

A continuación solo debemos ponernos manos a la obra para montar la mandala. Sobre un papel blanco dibujaremos con lápiz y trazo suave varios círculos concentricos sobre los cuales los niños pegarán con cola blanca los tapones por colores y empezando desde el centro y acabando en la parte exterior. Una vez acabada la podéis usar como mural decorativo en la clase, dará un bonito toque de color al aula.

La mandala en 3-D tiene aspectos a destacar

• La realización de mandalas ayuda a la concentración y observación.
• Además del trabajo puramente artístico, se realiza un trabajo intenso sobre diversos aspectos matemáticos.
• El trabajo con materiales en 3-D  con volumen es muy atractivo para los peques.
• El volumen y los materiales en 3-D nos permiten explorar y manipular las propias obras artísticas.

Fuente imagen:  Liz Jones Flickr