Trabajando las emociones en el aula: El juego de las bocas

Trabajar las emociones con los peques es una tarea que puede ser muy divertida. La educación emocional es de suma importancia para el desarrollo del niño. Es importante que les hagamos capaces de mostrar sus emociones sin reservas, que puedan explicar como se sienten, sus sentimientos, de manera libre y sobre todo tranquila. Verbalizar los sentimientos, ponerles nombre y gesto es básico para lograr que los niños aprendan a canalizar sus emociones de manera positiva.

Con este divertido juego aprenderán a conocer y gestionar sus emociones.  Es muy sencillo y les ayudará a poner «boca» a sus sentimientos. Os explicamos cómo prepararlo:

Qué necesitamos:

• Dibujos o fotografías con bocas diferentes: bocas contentas, bocas enfadadas, bocas burlonas, bocas tristes, etc.
• Palos de polo de colores

Cómo prepararlo:

Lo único que debemos hacer es colocar un palito en cada «boca». De esta manera nos quedará una especie de antifaz.

Cómo jugar: 

Una vez preparado el material sentaremos a los niños en asamblea y plantearemos una situación inicial. Podemos aprovechar un pequeño conflicto en el aula y a partir de ahí empezar una conversación con los niños a los que pediremos que nos muestren como se sienten cuando estaban enfadados. Ellos deben identificar la boca que simboliza el enfado y ponérsela delante. Entonces debemos preguntarles que si les gusta estar así, y que cómo prefieren estar. Seguramente eligirán la boca contenta.  Hemos de mostrarles diferentes situaciones con las que podamos cubrir todas las emociones básicas, de manera que los niños identifiquen la emoción de la que hablamos con la boca correspondiente, y además expliquen lo que sienten cuando están contentos, o tristes, o felices, etc.

Fuente imagen: Pinterest.